Toda novedad no es sino un olvido.


Hacia el alba, soñó que se había ocultado en una de las naves de la biblioteca del Clementinum.  Un bibliotecario de gafas negras le preguntó ¿Qué busca? Hládik le replicó: Busco a Dios.  El bibliotecario le dijo: Dios está en una de las letras de una de las páginas de uno de los cuatrocientos mil tomos del Clementinum.  Mis padres y los padres de mis padres han buscado esa letra; yo me he quedado ciego buscándola.