Toda novedad no es sino un olvido.


Y pensó en sí mismo y echó la mirada por los caminos trillados.  Visto así, edad atrás, fue fácil el trayecto.  Su entusiasmo un poco lacerado, inalcanzables sus objetivos.  Amó grandes y pequeñas cosas, en él y en los demás.  Ahora vendría el sueño largo, mínima compensación del hombre.  El sueño largo.