Toda novedad no es sino un olvido.


Pintar sólo puede hacerlo quien esté en condiciones de ver una cosa cualquiera en todo su encanto, ya se trate de una flor o un cabello humano. Todos los cuadros surgidos así son el espejo de un alma en armonía. Un alma simple y grande, que no necesita recurrir a símbolos para pintar el mar. —August Macke